RETIRADA DEL PAÑAL EN NIÑOS CON AUTISMO

La retirada del pañal y el control de esfínteres en la infancia.
La mayoría de los niños empiezan a tomar el control de sus deposiciones alrededor de los dos años. El pipí diurno comienzan a controlarlo a partir de los dos años y medios, no obstante el pipí nocturno requerirá algo más de tiempo.
El control de esfínteres es un proceso madurativo y fisiológico que no depende de nosotros y en el que no debemos intervenir decidiendo cuándo es el mejor momento.
Este proceso requiere ciertos avances tanto a nivel físico como emocional. Musculatura más fortalecida, mejor comprensión, conexión e interacción con el entorno, etc.
La retirada del pañal en el niño con autismo.
Será la alteración de los avances anteriormente nombrados, lo que hará que el proceso de retirada del pañal en niños con autismo se ralentice.
Las principales dificultades vienen dadas por sus particularidades en el procesamiento sensorial, las dificultades en las funciones ejecutivas y en su comprensión del entorno. Por tanto, para estos niños este proceso madurativo de controlar el pipí y la caca puede llevar más tiempo, lo cual requiere de paciencia y constancia.
Es recomendable quitar el pañal en la época de primavera o verano. En la época de verano hace menos frío y llevan menos ropa, lo que facilitará la retirada del pañal y el comienzo del uso del inodoro. Este es un proceso lento, y no se hace de un día para otro. El niño tiene que dar señales de que está preparado, para comenzar.
Recomendaciones para ir a usar el cuarto de baño en niños con TEA;
- Realizar un registro sobre la frecuencia con la que hace pipí o caca en el pañal;
- Elegir si vais a usar un adaptador de inodoro o un orinal;
- Trabajar la imitación. Cuando los niños ven a su familia usar el inodoro y a sus compañeros, es muy habitual que estos quieran imitarlo;
- Condicionar positivamente ir al cuarto de baño o sentarse en el inodoro. Hay niños que tienen miedo de ir al cuarto de baño o sentarse, ya sea porque creen que se van a caer dentro o por el ruido de la cisterna les cause terror u otros motivos;
- Pasos:
- Primero, el niño se sienta en el inodoro con la tapa puesta y el pañal.
- Segundo, el niño se sienta en el inodoro con la tapa abierta y el pañal. Recordar premiar mucho.
- Tercero, estar alerta, en momentos en los que el niño se haya hecho caca o esté intentándolo, llevarlo al baño, sentarlo en el inodoro y quitarle el pañal y que vean como la caca cae dentro del váter. En el caso del pipi, lo lleváis corriendo lo sentáis en el inodoro y le quitáis el pañal, aunque caigan unas gotas lo premiamos.
- Momento de quitar el pañal. Hacer un registro nuevo reflejando los momentos en los que el niño suele hacer caca y pipi durante el día. Por la noche aún mantenemos el pañal para dormir. Para ello tendremos que:
- Programar una rutina.
- Dar un modelo verbal para ir al cuarto de baño, si este tiene lenguaje. Cada vez que vayamos al cuarto de baño antes de hacer pipi o caca, le decimos que nos diga “quiero pipi” o “quiero caca”, o sonidos “pi” o “ca”. Desvanecemos esta ayuda verbal para que sea capaz de decirlo por sí solo y así lo generalicé en otros contextos.
En niños no verbales, puede ser un gesto o tocarse los genitales. Todo depende de las habilidades del niño, siempre podemos moldear y enseñarle nuevas habilidades. - Reforzamos cada vez que hace uso del inodoro correctamente. En conclusión debemos planificar de forma natural la retirada del pañal, teniendo en cuenta las necesidades del niño y respetando sus tiempos.